Para crear una experiencia memorable y fomentar reseñas positivas, a mí me funciona personalizar la bienvenida con un mensaje o una nota escrita a mano, y ofrecer detalles únicos como café, té y una guía de recomendaciones.
También mantengo una comunicación proactiva, siendo flexible y accesible a las necesidades de mis huéspedes.

Por último, me aseguro de que el espacio esté limpio y acogedor; estos pequeños toques realmente marcan la diferencia y dejan una impresión duradera.
¿Qué detalles sabes que te funcionan?